Uno de los desafíos científicos más importantes del siglo 21 es poder predecir el cambio climático futuro. Para lograr esto, es necesario estudiar los procesos por los cuales los diferentes componentes del sistema climático interactúan entre sí, tanto en el presente como en el pasado geológico, incluyendo al polvo atmosférico.
América del Sur es uno de aquellos lugares del planeta donde se puede estudiar la interrelación entre el polvo atmosférico y el clima por su conexión entre los materiales eólicos, transportados por el viento, que son desprendidos de las superficies áridas y su acumulación en sectores continentales en la región pampeana, el océano Austral y la Antártida.
Periodista: Nicolás Sepúlveda Moreno
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